Los Apóstoles del Inmaculado Corazón de María son una Asociación Pública de Fieles fundada por los Padres Ricardo Coll Mónico, Carlos Humberto Spahn y Jorge Hetze, en 2008 en la Diócesis de Campeche (México). Se trata de una Comunidad marcadamente contemplativa, caracterizada por la oración, el silencio y el trabajo manual. Teniendo en cuenta la oportunidad y las vocaciones, queda abierta la posibilidad de vivir vida estrictamente contemplativa, como también vida ermitaña. Tienen por Santo Patrono a San Pío de Pietrelcina y una devoción especial por la Virgen, a la que se consagran, bajo su advocación de Fátima.
El carisma de la Comunidad consiste en la liberación y el crecimiento espiritual de las almas. Liberación: Ayudan a las personas a dejar el mundo del pecado, de la superstición, de la visita a curanderos, magos, brujos, sectas… Rezan por ellos, con ellos y sobre ellos, con la oración de liberación y, si fuera necesario, con la oración de exorcismo. Crecimiento: Trabajan en pro del crecimiento espiritual de las personas. Esto es, su crecimiento en la gracia y el amor a Dios. Las ayudan a través de la dirección espiritual, los Ejercicios Espirituales y retiros, predicación de novenas, conferencias, catequesis, clases de formación, etc. Y rezan con ellos haciéndolos participar más activamente de la Liturgia, en la Santa Misa, en la Liturgia de las Horas, en las vigilias, etc. Cuentan también con una rama femenina: las Hijas del Inmaculado Corazón de María. Están presentes en México.