264. Fraternidad San Gilberto


La Orden Gilbertina fue fundada por San Gilberto de Sempringham en 1130 (en primer lugar la rama femenina) en Inglaterra, siendo aprobada por el Papa Eugenio III en 1148 (incluida ya la rama masculina). Implantada en territorio británico, la Orden fue suprimida por el rey Enrique VIII en 1538 dentro del contexto de la ruptura con la Sede Apostólica y la creación por parte del rey de una nueva religión. Las comunidades religiosas fueron entonces suprimidas y sus miembros leales a Roma perseguidos y asesinados. La Orden Gilbertina perdió sus 26 monasterios y algunos de sus religiosos pudieron huir a Roma llevándose las reliquias del Fundador. Esta Orden estaba formada por dos ramas que vivían en monasterios dobles: la femenina de monjas, bajo la Regla de San Benito y estatutos cistercienses; y la masculina de Canónigos Regulares bajo la Regla de San Agustín.


Hábito gilbertino
La Fraternidad San Gilberto fue fundada por el P. Carlos Aparecido Marchesani, siendo aprobada en la Diócesis de Jundiaí (Brasil) el 2 de febrero de 2002. Esta Comunidad se inspira en la Orden de Sempringham anteriormente citada. Su espiritualidad es eucarística pues nace inspirada en el acto de lavar los pies que hizo Cristo Servidor como signo de redención por la humanidad. El lavatorio de los pies se entiende como un signo de amor, servicio y reconciliación. Sólo mediante la comprensión del misterio de la Eucaristía y el compromiso evangélico, se puede comprender la dimensión de la Cruz como la participación en la misión de Jesús.



La Orden Gilbertina regentó iglesias, hospitales y escuelas, y la Fraternidad, actualizando el carisma, tiene por misión principal la recuperación de la dignidad humana en el sistema de exclusión social. Ofrecen apoyo psicológico y médico a los esclavizados por la droga, el sexo, la violencia familiar y de género; colaboran en la pastoral parroquial; administran los sacramentos; ofrecen dirección espiritual, etc.