Los
Discípulos del Espíritu Santo son un Instituto Religioso de Derecho Diocesano
fundado por el P. Salvatore di Módica en 1989 en Loja (Ecuador). Los Discípulos
se consagran a la evangelización con el espíritu y la mística de la Renovación
Carismática Católica, y cuenta con sacerdotes y hermanos coadjutores. Su
carisma implica la gracia de estar en suma docilidad a las mociones e
inspiraciones del Espíritu para que sea conocido, amado y servido,
estableciendo el reinado del Espíritu Santo en cada corazón, prolongando la
efusión de Pentecostés. Profesan un cuarto voto de fidelidad a la Iglesia y a
su Magisterio manifestando su adhesión a Pedro y al Cuerpo Místico de Cristo.
Abiertos al amplio campo del apostolado se dedican a misiones populares,
ministerio parroquial, catequesis, Ejercicios Espirituales, medios de
comunicación social, dirección y orientación espiritual, etc. Están presentes
en Ecuador y cuentan con una rama femenina: las Discípulas del Espíritu Santo.